Los afectados por los incendios de Ateca y el Moncayo reclaman en Zaragoza ayudas justas y una mejor gestión forestal
Plantan un bosque simbólico ante la sede del Gobierno de Aragón para que no se olvide el desastre que han dejado las llamas en sus pueblos y en sus explotaciones agrícolas, pero también para mostrar su esperanza de que «los valles vuelvan a la vida».